Que hay vida más allá del pop rock lo sabemos todos, pero a veces se nos olvida. Por eso, es más que necesario asistir a un concierto que se salga de lo establecido de vez en cuando, como el que dieron el pasado 1 de febrero Suso Díaz & The Appaloosas y Tangerine Flavour en la mítica sala El Sol, dentro del ciclo Inverfest. Un concierto en el que cambiamos Madrid por Nashville, cuna de la música country, y en el que tampoco faltaron los sombreros de vaquero ni las armónicas, elementos tan característicos de la música americana.
Pero empecemos por el principio. Suso Díaz & The Appaloosas fueron los encargados de inaugurar la noche, una noche que no era fácil en cuanto a que su concierto coincidía con numerosas ofertas culturales en la ciudad, pero aun así, eso no les impidió venirse arriba y darlo todo sobre las tablas. Empezaron fuerte con Nobody Calls, tema que abre su último trabajo, «Love, Loneliness & Conclusions», del cual presentaron más canciones durante la velada, como Installment Plan, Hollywood, Riverside o Love, por mencionar algunas, demostrando su solidez en el escenario y la carretera que llevan a sus espaldas. De hecho, tuvieron que buscar un batería sustituto poco antes del concierto (nos cuentan que el batería y el bajista se conocieron en la misma prueba de sonido), fichando al gran Tweety Capmany (Hermana Furia, Nat Simons, etc.) para que les acompañase en una noche tan especial, y aun así lograron sonar compactos y sin perder un ápice de su esencia.
Y es que si algo hay que destacar de Suso Díaz & The Appaloosas es que además de la cuidada instrumentación de las canciones, saben jugar muy bien con las armonías vocales, dándole a cada tema lo que necesita, algo que se plasma a la perfección en una de las canciones más representativas de la banda, Appaloosas, donde el público se animó a acompañarles aunque tímidamente a los coros. También hubo tiempo en el repertorio de repasar algunos de los temas antiguos o ya conocidos del grupo como This Is Not Summer o The Street Where You Used To Live, poniendo el broche de oro a su paso por la Sala El Sol con Broken Bones, que es, en las propias palabras de Suso Díaz, «la canción más discoquetera que hemos sacado nunca».
Y así, con el ritmo de baile metido en el cuerpo, dieron paso a la segunda banda de la noche, nuestros queridos Tangerine Flavour, que, como siempre, salieron dispuestos a dejarse la piel sobre el escenario. Aprovecharon su paso por tan mítica sala para presentarnos las canciones de su nuevo disco, «Empty Fantasies», publicado recientemente, y que particularmente, era la primera vez que disfrutaba en directo, así que las ganas por oír estos nuevos temas eran muchas. Desde luego, que no decepcionaron, fue un concierto enérgico, divertido y en el que todos fuimos invadidos por el espíritu del blues y por los grandes nombres de la música country, haciendo que nuestros pies se movieran sin poder evitarlo.
Durante la noche nos deleitaron con los temas de este nuevo disco, como Ten Dollars, God, Roses o Promises Land, por mencionar algunas, pero sin olvidarse de temas icónicos de la banda, como Red River y It Ain’t Over Yet, pertenecientes a su anterior trabajo, «No Hard Feelings», o Song for Alba, de su primer EP, demostrando su evolución a lo largo de todos estos años de trayectoria, hasta llegar al día de hoy, donde han consolidado su sonido y también la formación, con Alex Vizcaíno haciendo un gran trabajo a la guitarra y a los coros y Mike Fletcher a la batería.
Uno de los momentos más divertidos del concierto fue cuando Pablo nos contó entre risas que la siguiente canción de su nuevo trabajo, What Are You Doing? fue traducida por un medio argentino durante una entrevista como «¿Qué hacés?», dando lugar a varios chascarrillos entre la banda y provocando las risas del público. Además, como anécdota Fer llevaba la misma chaqueta que en la portada del disco, como si fuera una especie de señal para cerrar el círculo.
Para el final se habían reservado la canción que da nombre al álbum, Empty Fantasies, para la cual contaron con la colaboración de Suso Díaz y Helena Poza, de Suso Díaz & The Appaloosas, y con la que consiguieron emocionarnos a todos, creando una atmósfera muy especial en la sala antes de dar paso a la canción con la que suelen cerrar todos sus conciertos: The Weight de The Band. Como es ya tradición, hicieron subir al resto de miembros de Suso Díaz & The Appaloosas al escenario, y terminamos todos juntos cantando eso “Take a load off Fanny / Take a load for free” creando un gran momento de hermanamiento entre público y bandas, cerrando la noche por todo lo alto y dejándonos con ganas de más. Así que gracias, Tangerine Flavour, gracias, Suso Díaz & The Appaloosas, y gracias Inverfest por dejarnos formar parte de una noche tan inolvidable como la que vivimos. ¡Nos vemos pronto!
En Clave de Indie 
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