El pasado 21 de abril tuvimos la suerte de acudir al conciertazo que dieron The Noises en Madrid.
Nada más llegar vimos a los seguidores impacientes por entrar a la sala y poder estar entre las primeras filas. El concierto lo abrió Venturi, una composición de tres chicos (Jonas, Lucas y Daniel) que le dan bien duro al pop-rock. Empezó a vibrar la sala con Las chicas vienen a vernos, donde hasta el público que no los habían escuchado antes empezó a flipar con los teloneros que habían elegido The Noises para abrir la noche. Continuaron con Volando donde todos empezamos a bailar a ritmo del bombo y los riffs de guitarra y a cantar el ooooh! del estribillo.
Venturi iban sorprendiéndonos a cada momento, su actuación iba en crescendo hasta que llegamos a I am a woman y vemos como Lucas (guitarrista) y Jonas (batería) se cambian de instrumentos. Ahí el público no tenía ni idea de que estaba pasando, pero en cuanto los escuchamos no pudimos evitar gritar de la emoción: SON TODOS SÚPER BUENOS. Continuaron la muestra de pop-rock con Vámonos al centro, una canción donde predomina la batería y donde encontramos a Daniel con una locura de voz que no sabes en que sitio la tenía. Dieron paso a The Noises con Paro mi caballo.
Se apagan las luces, empieza la base de la primera canción con las dobles voces y The Noises aparecen paulatinamente y Fran incita al público con un ‘VAMOS’ a unirse a la fiesta que van a montar. Comienza En casa anunciando Fran que se siente en ese momento precisamente como en casa.
Al llegar a En el centro de la tierra el grupo quiere hacer una dedicatoria especial; a Avicii, el público rugió de la emoción. Es una canción que empieza muy oscura pero gracias al teclado se corta la tensión y comienza el estribillo anunciando un tema cañero que, sin duda, es una declaración completa de intenciones hacia alguien. Continuaron con las dos contraposiciones más grandes de sus canciones; Verano e Invierno, dos canciones con diferentes mensajes pero causándonos ambas ganas de bailar. En estas dos canciones vemos como las 6 cuerdas y las 4 cuerdas se lucen a más no poder, aunque en Invierno la batería no se queda corta. Nada más acabar estos exitazos, Fran contó que en breves contarían por sus redes todo lo que han pasado hasta llegar al concierto porque según él fue toda una odisea.
Llegó Rapto, su canción favorita, una canción oscura que sacaron y está perdida por Spotify, con Colmillo y Rey Dragón, pero a la que tienen mucho cariño. La guitarra y el bajo comenzaron y el público con palmadas marcaron la percusión de la primera parte. Nada más acabar la voz de esta canción salió de escena y dejó que 4/5 de The Noises se volvieran locos y dejaran a todos los asistentes sin palabras. Lo lograron.
Después de la locura de concierto que llevaban The Noises, decidieron compartir escenario con Alberto de Miss Caffeina. Todo el público a coro les ayudaba a cantar a los dos, fue algo tan sumamente mágico que nosotras estábamos embobadas mirando las reacciones del público y de estos dos artistazos.
La penúltima canción fue Accederás, en la que Fran nos pidió que cantáramos con él: ‘Soft light tranquilitou’ y a capella todos cantamos a la par: ‘Eres el agua que brota dentro de mi cuerpo, eres el aire jamás jamás te pierdo el rastro. Eres el fuego me quemas cuando me despierto, eres la tierra sustentas firmes nuestros pasos’. Y entonces comenzaron los aplausos acompañando a la percusión, guitarras y bajos. Un momento precioso que nos encantó vivir y ver como el público de The Noises disfrutaba tanto como ellos.
Por desgracia, todo lo bueno se acaba y estando al final del concierto, Fran le pide a una fan que suba; Cristina, acompañada de siete amigos. Micro en mano nos anuncia que tiene algo que decir a la persona más importante de su vida, pidiéndole matrimonio a su novio; ambos seguidores de la banda desde hace tiempo. Con el sí comenzó la fiesta con Pacífico y Thelma y Louise. Nuestra más sincera enhorabuena al futuro matrimonio.
Salimos de la Joy Eslava contentas de haber presenciado un concierto lleno de buen rollo, buena música y el talentazo de los dos grupos. Algo que originó la gran magia que buscamos en los conciertos… Felicidades, The Noises, lo conseguisteis, habéis vuelto a casa llenos de magia, gracias por una gran noche.
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